7.16.2006

GUERRA ASIMÉTRICA

Qué nos hace perfectas? Qué nos hace felices?. Nos pasamos la vida intentando ser mejores, más profesionales, mejores amigas, amantes, parejas. Hacemos dietas, nos envolvemos el torso con yeso por semanas, para lograr perder 8 milímetros de contorno de cintura, y nos pasamos el día llorando los puntos extras que contenía el jugo de naranja que nos tomamos.

Cada vez más intentamos meternos en los angostos cánones de belleza que gobiernan nuestras miradas y las de quienes nos rodean. Nos esforzamos por alcanzar una perfección que es cada día más inalcanzable. Sobresalimos en carreras universitarias o concursos de belleza. Hacemos que crecemos, y predicamos a los cuatro vientos cuánto evolucionamos después de la ruptura de nuestra última relación amorosa, o las manos milagrosas del doctor fulano de tal, especializado en las rinoplastias más naturales de la farándula. Y nos convertimos en seres bellos, amables, vanguardistas y elegantes.

Y cada vez estamos más cerca, más cerca de ser perfectas y mejores. Pero para qué? Qué ganamos con la excelsa llegada a ese nirvana moderno? A qué costo somos “las mejores”? si es verdad que llegamos a serlo… pues esta perfección casi nunca es auténtica y profunda.

Estamos sometidas a esta meta, que se convierte en nuestro objetivo y forma de vida, pero… para estar satisfechas? O más bien para complacer a los demás: familiares, amigos, jefes, parejas, hijos.

Realmente ganamos algo con ser perfectas? Qué viene de ñapa acompañando al título de “el país de las mujeres bellas”?, aparte de restricciones obsesivas en el consumo de carbohidratos y miles de ofertas de todas las entidades bancarias nacionales, ofreciendo créditos pagaderos a bolívar por año, para cirugías estéticas y dientes más blancos y alineados: vaya de 32A a 36C en solo 48 horas, con sólo presentar su constancia de quince y último, y un recibo de luz o teléfono.

Así estamos, y así vamos, más cercanas a nuestro ideal y más lejos de estar satisfechas, en una guerra siempre asimétrica con el espejo.